Recuperando lo auténtico.
Os presentamos el secreto de nuestro producto, la materia prima: especialistas en el cultivo ecológico que seleccionan, siembran, cultivan y recolectan sus productos empleando semillas, métodos de cultivo y almacenamiento con un control ecológico absoluto.
Gracias a ellos, los productos Smileat tienen siempre ese sabor auténtico. El tomate sabe a tomate. El pollo crece en el campo, en libertad y se alimenta de manera ecológica. Y las verduras son verduras como las de antes, sin pesticidas, colorantes o conservantes.
Y por supuesto, en la elaboración de los alimentos no añadimos ningún ingrediente extra para preservar el sabor, color, olor etc. No hay aditivos, ni conservantes, ni ningún componente que no sea 100% natural.
Nuestros productos tienen un sabor delicioso, auténtico, el sabor de la comida hecha en casa.
¡Nuestras madres y nuestras abuelas estarían orgullosas!