Vamos a iniciar una serie de artículos sobre los beneficios de diferentes materias primas que utilizamos en la elaboración de nuestros tarritos ecológicos. ¡Hoy empezamos con la zanahoria!

Estas hortalizas de intenso color naranja ofrecen una gran cantidad de beneficios para la salud de los peques.

Es un maravilloso alimento desde el punto de vista nutricional gracias a su contenido en vitaminas y minerales. El agua es el componente más abundante, seguido de los hidratos de carbono, siendo estos nutrientes los que aportan energía.

El llamativo color procede de una alta concentración de betacaroteno. El betacaroteno es uno de los pigmentos del grupo de carotenoides, que agrupa a pigmentos rojos, anaranjados y amarillos. Su importancia se debe a que tanto el betacaroteno como otros carotenoides proveen aproximadamente el 50% de la vitamina A que necesitas en tu dieta.

La vitamina A como ya sabréis ayuda a proteger la superficie del ojo, lo que es esencial para una buena visión. Además, esta vitamina ayuda a fortalecer el sistema inmunológico desde el tracto respiratorio, digestivo y urinario.

Además, el betacaroteno es también un agente antioxidante natural, que protege contra muchísimas enfermedades, previene problemas cerebrovasculares y enfermedades del corazón.

Otros beneficios que tienen las zanahorias es que aportan una gran cantidad de agua (son un 90% contenido acuoso) Por lo tanto, ayuda a hidratar las células de nuestro cuerpo, favoreciendo todas las funciones del organismo.

También son una muy buena fuente de fibra dietética, que es muy buena para el tracto intestinal y las digestiones, vitamina C, vitamina K, ácido fólico y manganeso, y sobre todo potasio. El potasio es un micronutriente fundamental para el crecimiento de los músculos, la producción de proteínas, el control de la actividad eléctrica del corazón, la regulación del nivel de agua en el organismo y la disminución de los efectos negativos del sodio, entre otras funciones, está presente en carne, pescado, frutas, verduras, lácteos y frutos secos.

Masticar zanahorias puede ayudar a mantener sanos los dientes y las encías. Las zanahorias crudas ayudan a raspar la placa y los minerales que contienen previenen el daño dental y fortalecen el esmalte.

Igualmente, la zanahoria tiene poquísimas calorías pero, como hemos visto, aporta muchos nutrientes, así que ¿por qué no incluirla más a menudo en nuestra dieta?

¿Sabías que las zanahorias naranjas aparecieron en los Países Bajos durante el siglo XVII?, pues curiosamente fueron los agricultores neerlandeses los que seleccionaron las zanahorias de color naranja para homenajear a la real casa de Orange.